Corrección de Color
(Spoiler: No es solo para pros)
La corrección de color suena complicada, pero en realidad es muy sencilla.
Consiste en usar un tono durazno o naranja para neutralizar zonas oscuras como ojeras, manchas, paño o incluso tatuajes.
¿Por qué funciona? Porque el naranja es el color opuesto al azul y morado en la rueda de color —y al aplicarlo encima, los tonos se equilibran y se cancelan.
¿El bonus? También puedes usarlo como rubor si tienes la piel media a oscura. Es ese héroe silencioso que muchas veces pasa desapercibido…
Aplícalo y difumina con intención.
(Sí, esto va antes de tu base o tu SKIN)
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Ojeras: El naranja neutraliza los tonos morados o azulados que suelen aparecer bajo los ojos. Aplícalo en la zona de la ojera y difumina suavemente con el dedo anular o una SPONGY húmeda. No te preocupes si parece muy intenso: al poner tu SKIN encima, todo se equilibra.
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Paño y manchas: Si tienes zonas con hiperpigmentación (como el famoso paño), este corrector ayuda a igualar el tono de piel. Solo necesitas una capa ligera y bien difuminada.
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Tatuajes o marcas más profundas: Para cubrirlos antes de tu base, el naranja actúa como una primera capa que neutraliza la oscuridad. Luego puedes aplicar el SKIN de tu tono encima.
Blush cálido para pieles medias a oscuras
¿Tienes la piel media a oscura? Este corrector puede hacer doble trabajo como rubor en crema.
Solo pon un poquito en las mejillas y difumina con la SPONGY.
El tono naranja aporta un toque cálido y totalmente natural, como si acabaras de tomar el sol.
